Librophonia; leer durante esta época.

Decíamos, en semanas anteriores que cuando se trata de leer, encontramos todo un mundo de curiosidades; gadgets, inciensos, grupos de acompañamiento, vestimentas, tipos de iluminación, métodos de respiración, podcasts, apps que leen por ti, costumbres, rituales, posturas, horarios, soundtracks, snacks, espacios favoritos y una lista enorme de cosas que van de lo sublime a lo extraño. esta semana reflexionamos sobre el tema central de esto, que es, la lectura.

Decir una vez más, en que momento de la historia del mundo nos encontramos es caer en lo mismo, es retomar lo que ya se ha dicho, escrito, expresado en memes, en videos, en tiktoks, en libros, en tracks, en podcast, en videos, en streamings de todo tipo; es incluso un poco morboso y hasta pesado. Estamos en un momento difícil, simplemente.

En una situación así, para muchos, leer no es precisamente una opción primordial, habrá quien diga que puede ser una actividad vanal, una distracción, un escape descarado, una salida fácil a la problemática actual. En realidad, puede ser completamente lo opuesto; leer puede convertirse en una forma de encarar y afrontar estos tiempos de una forma completamente lúcida y digna, la lectura puede convertirse en una forma mediante la que, en una época digital y visual, podamos alimentar el espíritu, el intelecto, la imaginación, la paciencia y el aprecio por las cosas buenas que como humanidad hemos creado. Mediante la lectura, por los medios que sean, podríamos, podemos y podremos seguir y salir ilesos o al menos intentarlo de la mejor manera de todos estos difíciles momentos.

Tomen su libro, enciendan su dispositivo favorito, abran la aplicación de lectura en su tableta, en su teléfono inteligente; retomen el capitulo perdido hace semanas, hace meses. abran el archivo olvidado en alguna carpeta perdida entre la memoria, traten de recordar la página perdida hace tiempo. lean para disfrutar, para volver a imaginar, para caminar entre las calles o por los caminos o por los pasillos de las casas, mansiones, espacios abiertos o cerrados que su escritor predilecto pinta en su texto. Lean para aprender cosas nuevas o para reafirmar cosas que aprendieron hace tiempo pero que poquito a poquito se han desdibujado de su mente. Lean para poder conversar por videollamada o por llamada de voz con alguien más de un tema que sea diferente al pesimismo de los tiempos, para poder contarle al interlocutor al otro lado del lente o de la bocina sobre los mundos encerrados en los libros que están ustedes leyendo. Lean de temas de apoyo, de métodos de animar, de temas de interés humano, para poder ayudar a los que están sumidos en un trance de sufrimiento, para poder estirar la mano y sacar de la tribulación a los que están en dificultades. Lean para reírse como locos, también para llorar un poquito y aprovechen para sacar el miedo y la tristeza acumulados con el pretexto de que la trama es emotiva hasta las lagrimas, Lean de temas científicos, de temas sociales también, de geografía, de estadística, de temas que pudieran ser áridos, aburridos, quizá hasta incomprensibles por estar plagados de términos técnicos o científicos, Lean de esto también, para poder combatir a las miriadas de noticias falsas y a la ignorancia que plaga las redes sociales, las pláticas familiares o con amigos, lean para poder ayudar a entender la realidad y para poder evitar la desinformación, lean para saber que hacer y como lidiar con las cosas, con los síntomas, con los síndromes mentales y también con las cosas imaginarias que han surgido en estos meses. Lean para no sentirse solos, para sentarse acompañados de cientos de personajes, lean para salir a caminar, a navegar, a correr, a nadar, a flotar en el espacio, a pilotar una nave, lean para despejarse o para centrarse nuevamente.

Lean cosas oficiales y también independientes; lean en papel si es que aún pueden acceder a periódicos físicos, lean en digital; lean para entender, para poder criticar acertadamente, para poder conocer y enfocar lo que está pasando mas allá de tergiversaciones y malos enfoques. También para pensar la realidad mas claramente mientras se imaginan cosas que sólo existen en las páginas y en su mente y en la mente del que las escribió. Lean para poder seguir disfrutando del placer de la lectura. Lean, porque leer y la lectura y la literatura es un arte y el arte, en estos tiempos, ayuda a sanar, a despejarse y a apreciar la vida bella. Lean, porque en un momento donde todo puede ser oscuridad y mala sangre; la lectura puede servirnos para iluminarnos y sanar y seguir adelante.