GeekLibrosVida

Librophonia; los libros que no quieres sacar de tu librero

0

Ampliando y contrastando la idea de que todos los libros que pueblan una casa tienen su historia y que siempre hay uno o varios que son únicos a los ojos de cada dueño, también hay uno (o varios) que tienen una historia no tan amable o no tan cómoda y a veces hasta con cierto grado de dolor. Estos son los libros que a diferencia de los mencionados anteriormente, no son favoritos pero se mantienen en el librero precisamente por una especie de aprecio o hasta quizá por un poquito de masoquismo.

En esta categoría de libros no se pueden precisar cantidades ni calidades, tampoco se pueden señalar formatos o características específicas o generales; no se puede decir que tipo de libro es el que se convierte en algún punto de la historia personal de cada lector en una incomodidad difícil de remover. Cada lector podrá dar cuenta de las particularidades de ese o esos libros que son la fuente de sus malestares o que remueven recuerdos o despiertan ecos de situaciones difíciles. Haciendo clara la diferencia respecto a los libros que son especiales, que también guardan recuerdos pero de un tipo memorable o altamente sentimental e incluso amoroso.

Los libros incómodos adquieren su estatus a partir de momentos ásperos, en medio de situaciones de dolor o de duelo o en actos de tensión; son libros que llegaron a las manos del lector de modos extraños o acompañados de eventos particularmente complicados, por decirlo de una manera simplificada. Hay libros de este tipo que llegaron en medio de una perdida familiar, en una situación de duelo y luto y en esa circunstancia se convirtieron en acompañantes momentáneos o distractores circunstanciales y de ahí, no se fueron más y se quedaron, como libro y como recuerdo de ese instante. Otros se quedaron después de una despedida amorosa como testigos dolorosos, abandonados u olvidados, a veces desechados o dejados atrás en el abandono o en la partida de una de las partes involucradas e igual, adquirieron un sitio a fuerza de ser una pieza de resistencia al olvido. Libros que fueron encontrados en una sala de espera de hospital mientras se esperaba el parte médico, el resultado de una cirugía o el informe de una emergencia familiar y que se quedaron y acompañaron el momento difícil. Otros libros que se quedaron esperando el viaje en una sala de espera de autobuses o aviones abandonados por su anterior dueño y posteriormente viajaron con el lector que los guarda ahora. Hay libros que aparecieron en una habitación de hotel en un viaje que no salió bien y que regresaron a casa del lector y traen entre sus páginas el recuerdo de un encierro por mal clima o por huracanes inesperados que arruinaron el viaje a la playa o la receta médica de una enfermedad de vacacionista que echó a perder un viaje de placer. Hay al menos una historia en la memoria de el que esto escribe, de alguien que se quedó solo con un libro en la mano después de un encuentro con un asaltante y de otra persona que cuando le abrieron su auto y le vaciaron su cajuela de portafolio y mochila y se quedó sin radio ni bocinas y hasta llanta y herramienta, sólo se quedó con un libro arrugado bajo el asiento, libro que hasta la fecha mantiene sus arrugas y la historia de ese hurto. Hay en una casa conocida un libro que fue como acompañante a un velorio y posteriormente a un sepelio y del que, por el trance luctuoso y por la asociación al momento dolido, solo se han leído las primeras 5 páginas y no se ha vuelto a tocar.

Libros de este tipo hay en todo librero, todo lector tiene uno o varios, igual que los recuerdos y los momentos, buenos y malos. En todos los casos, como se dijo la semana anterior y en esta ocasión, se convierten en especiales por razones opuestas y mientras que los anteriores se atesoran y no se permite su perdida, estos últimos se mantienen, como lo decíamos líneas arriba, como testimonio del dolor o por mero masoquismo. son especiales, son incomodos y quizá por eso no se van, por el recuerdo.

Facebook Comentarios
Librophonia
Dice (el) que hace muchas cosas; algunas se escuchan, otras se leen, otras se ven y hacen ruiditos. Dice que es muchas cosas o poca cosa. Depende.

    librophonia; los libros con historia adicional.

    Previous article

    Lluvia x Zeydher Blaster #video

    Next article

    You may also like

    Comments

    Comments are closed.

    More in Geek