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Librophonia; otras formas de empezar este año leyendo

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Retomando el hilo de los memes a propósito de de los días de arranque del año, hay uno muy particular que utiliza una foto de Morticia Adams en su conocida mirada sarcástica y la frase “las veo muy contentitas, ¿ya se pesaron?” en referencia a los estragos dietéticos que dejan todas las celebraciones de final de año y de ese meme, podríamos derivar quizá uno para las actividades en torno a la lectura; la frase podría ser “los veo muy llenitos de propósitos, pero ¿ya empezaron a leer? e igual que el meme original, posiblemente cortaría el buen momento de algunos, en este caso lectores remisos que aún no arrancan su año lector.

Hay que reconocer, que a veces, no es sencillo arrancar cuando de lectura se trata y más a principio del año; la economía personal queda un poco resentida por los gastos de la temporada (que no son pocos y eso casi todo mundo lo sabe), es inicio de año laboral para muchos, para algunos sistemas escolares es inicio de cuatrimestre, semestre o el sistema que utilicen; para otros es retomar la rutina escolar del curso (en el caso de educación básica) y razones variadas, según la situación de cada lector, que como ya hemos dicho, es muy particular e irrepetible.

Es en este momento del año, donde podríamos aplicar algunas de las “recetas” para lidiar con estos atorones, con estos momentos de pausa, que por cierto, hay muchas recetas; la mas simple es generar una lista de lecturas pendientes con todos esos libros que fueron olvidados en algún momento del año anterior, lo que implica en cierto modo una revisión a lo que se logró como lector y lo que puede mejorarse en esta nueva oportunidad. Otra lista que puede realizarse es de libros sin leer que sean de interés y repartir los títulos seleccionados a lo largo del año que está comenzando. Planteábamos la semana pasada una lista de cinco libros antes de que llegue la primavera y se puede ampliar la idea estableciendo un lote de libros similar para cada estación del año. Otra opción es establecer temas y a cada mes del año asignarle una temática en particular y hacer el esfuerzo y el compromiso de leer todo ese mes, libros de la temática designada, uno o los que sea posible; de esta, se puede desprender una adicional, que es proponer dicha dinámica a un grupo de amigos lectores, con el añadido de que cada uno, al termino de cada mes, prestará a otro del grupo, sus libros del mes y recibirá en rotación, otro lote, este a su vez, de otra temática, fomentando el espíritu de colaboración entre lectores. Hay varias dinámicas que proponen establecer un tiempo mínimo diario para la lectura, el numero de paginas varía de acuerdo a cada versión de este método, desde las 5 páginas hasta las 20 y se supone que siguiendo estos métodos, se puede leer un libro de unas 300 o 400 páginas en unos 15 o 20 días. Haciendo la observación de que esto depende también de la velocidad de lectura de cada persona, de la posibilidad de que el numero de paginas pudiera variar de día a día y otros factores imprevistos en el método.

Dinámicas para organizar el año en términos de lectura hay muchas, de hecho, en todas las redes sociales y en publicaciones culturales en linea e impresas es posible encontrar opciones y consejos. De cada lector y del nivel personal de compromiso y afición a la lectura dependerá cual se ajusta más y cual conviene más a sus intereses. como todo, la cosa es, siempre buscarle.

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Librophonia
Dice (el) que hace muchas cosas; algunas se escuchan, otras se leen, otras se ven y hacen ruiditos. Dice que es muchas cosas o poca cosa. Depende.

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